Las expresiones faciales pueden ser engañosas. Un ceño fruncido o una mueca pueden simplemente significar que algo es desconocido, no que te desagrada.
En Kekoa, creemos en el Aprendizaje del Gusto™ . Esto significa ofrecer nuevos sabores con frecuencia y sin presión, para ayudar a los pequeños a convertirse en comensales audaces.